El martes 9 de abril comenzó en el Tribunal Federal de San Martín, Buenos Aires, el juicio oral y público de la “Causa Contraofensiva”, por los delitos de lesa humanidad cometidos entre los años 1979 y 1980. Los acusados son nueve y están vinculados con la estructura de Inteligencia del Estado que operó para la ejecución de al menos cien casos de secuestros, torturas y desapariciones de militantes que se sumaron a la campaña de contraofensiva de Montoneros para resitir a la dictadura. El juicio, con casi 250 testigos, se desarrollará durante el próximo año y medio.
“Este pueblo siempre resistió a cualquier avance que han tenido estos proyectos y hoy también lo sigue haciendo”
Antonio Fernández, es un luchador eterno por los DDHH, es representante del Servicio Paz y Justicia (SERPAJ). Milita desde los 15 años, empezó en la Juventud Obrera Católica a fines de los 60. Fue uno de los primeros seminaristas obreros: trabajó en fábricas de alimentos, metalurgia y cerámica. A fin del 75 fue secuestrado y encarcelado en Coronda, Santa Fe. Permaneció preso hasta 1982.
Como referente del Serpaj, e integrante del Espacio por la Memoria de Campo de Mayo, acompaña el proceso judicial de la Causa Contraofensiva. En diálogo con Proyecto Erre relata que durante el Terrorismo de Estado en Argentina muchos de los jóvenes exiliados se agruparon a fines de los 70, especialmente en España y México, para entrar al país y encarar una campaña en rechazo a la dictadura. Mientras tanto en Argentina, y en casi toda América Latina, en el marco del Plan Cóndor, funcionaba un aparato de inteligencia feroz para detenerlos.
La militancia se organizó en los llamados Grupos de Agitación que estaban integrados por jóvenes exiliados, delegados de fábricas, estudiantes, que tenían que tratar de impulsar acciones de propaganda, buscar la manera de interferir señales de radio, demostrar que no estaban de acuerdo. Pero jefes de distintos países del mundo lograron interferir estas campañas y así la tortura, la desaparición y la muerte.
Este juicio, por otro lado, pone en cuestión el discurso dominante respecto al accionar de Montoneros en aquellos años. Antonio, en ese sentido dice que tenían derecho a la resistencia. Recuerda que en las cárceles también se planteaban la reagrupación. Había resistencia también en las calles. En el 79 se da primer paro nacional, y Montoneros impulsa la resistencia con distintos métodos. Para Antonio es muy importante el juicio para celebrar que un grupo haya dicho: no estamos de acuerdo y tenemos derecho a decir no, con distintos métodos si era necesario.
Escuchá la nota completa:
1 Comment
[…] podés leer y escuchar la nota de Antonio Fernández, referente del Serpaj, e integrante del Espacio por la Memoria de Campo de Mayo, que acompaña el […]